Un punto azul pálido, nosotros, nuestro
hogar, y en el todos los que amas, todo lo que conoces todos de los
que has odio hablar, todo ser humano que ha existido ha vivido su vida en este lugar, toda
joven pareja enamorada toda madre y padre, hijo de la esperanza, todo santo y
pecador de la historia de nuestra especie ha vivido ahí, en esa mota de polvo
suspendida en un rayo de luz tan frecuentes sus malentendidos, tan fervientes
sus odios nuestra imaginaria importancia de la ilusión de que tenemos una posición
privilegiada en el universo es desmentida por este punto de luz pálida. Nuestro
planeta es una partícula solitaria en la enorme y envolvente oscuridad cósmica.
En toda esa bastedad no hay ningún indicio de que llegará ayuda de otra parte
para salvarnos de nosotros mismos,
aunque no nos guste por el momento la tierra es donde luchamos puede que
no haya una mejor demostración de la disparatada pretensión humana que esta
distante imagen de nuestro pequeño mundo, subraya nuestra responsabilidad de
convivir más gentilmente entre nosotros y de preservar y apreciar el punto azul pálido el único hogar que jamas hemos conocido.
Ese punto azul pálido está inspirado en una imagen de nuestro planeta, captada por la sonda Voyager I en 1990 a 6.000 millones de kilómetros de distancia...